Escribe: Alberto Vega
Para ti amigo (a) venezolano (a), esto es para ti:
El reloj marca las 05:00 a.m. y es momento de la verdad, es momento del fútbol. El momento de ver a tu selección una vez más como en el primer día, aquella victoria en el partido del debut ante Alemania, llegó. La gran diferencia es que hoy fue la final, sí la final. Esa final con la que muchos no imaginaban ni en sus más profundos sueños y/o anhelos, pero que se dio.
Se dio para darle paso a la alegría, a pesar de los miles de problemas que tienes enfrente. La felicidad no te la quitará nadie ni ese gol de Calvert-Lewin a los 34’ que nada de eso obstruya tus sentimientos, esto es pasajero. Algunas personas, estúpidas por cierto, apelan que en el fútbol solo valen los títulos para ser feliz y sentirse realmente alegres con su equipo. Pero ellos no se han dado cuenta de algo: este equipo, tu equipo, tu selección ha dado lo que muchos no darían.
¿Y sabes por qué no lo harían? Simplemente por cobardía, por miedo, por ceguedad y hasta por maldad. Lo tienes bien en cuenta cuando menciono la palabra maldad todos aquellos que le hacen daño a tu país hoy están subiéndose al coche de la ‘Vinotinto’. Ese coche que debería ser solo tuyo, de los que apoyan, de los que alientan, de los que se levantan cada mañana con la ilusión de superarse día a día. Esto es tuyo, la selección es el reflejo tuyo.
Tan tuyo como tus Arepas que vendes con tu propio sudor para salir de esta terrible crisis, ese sudor que lo tuvieron en cuenta los futbolistas los 90 minutos del partido de hoy. El sudor de ellos al pasarse la pelota para anotar el gol, es tuyo también. Repito nuevamente: todo lo que se hizo en el Mundial te pertenece.
En el párrafo anterior se habló del presente y dejémoslo por mientras ahí, no hablemos del futuro por lo menos hoy no. Es impredecible, misterioso y, para algunos, perturbador. Disfruta de este logro, porque en el fútbol la felicidad no se mide necesariamente por títulos, todos quieren ganar eso es cierto, pero que no se confunda el resultado con el legado que dejan ellos.
Venezuela esto es solo el inicio de algo grande, tienes de aliado a tu trabajo. No es lo que pierdes sino lo que ganas y ya lo hiciste.
Todo lo hecho hasta hoy ya se ganó algo, la proyección que tienen estos jugadores es realmente impresionante si siguen en la línea del crecimiento continuo. Miremos lo que tienen en su arco ahí está Wuilker Faríñez, un muchacho de 19 años; la defensa lo habitan, por mencionar algunos nombres, como Ferraresi o Hernández; la volante es enriquecedora con las actuaciones de Yangel Herrera, Ronaldo Lucena, Adalberto Peñaranda o Yeferson Soteldo ; y en la delantera la actuación de Peña. Pueda que sea injusto en no mencionar a todos, pero créanme no lo soy.
Esto es fútbol y siempre te da revancha, no importa cuando será ese día. Lo que realmente importa es que ustedes sigan por ese camino de la construcción de su fútbol venezolano. No adelantar procesos, no sería correcto que todos los que estuvieron en el Mundial Sub 20 pretendan que entren de una vez por todas a la Selección Mayor, esto no se da así. Todo en su momento el tiempo está a su favor.
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