Claudio Pizarro fichó por el Colonia, buscando cerrar muchos capítulos en su extensa carrera en la Bundesliga. El cuadro de los 'chivos', por su parte, busca salvarse del descenso y tener en Pizarro un jugador con experiencia para poder guiar un equipo con muchos jugadores jóvenes que pueden ver en Claudio a un nuevo referente.
Foto: 1. Koln (Oficial)
Escribe: Gustavo Adrianzén
Claudio Miguel Pizarro Bosio, a sus 38 años, casi 39, fichó por el Colonia (1. F.C. Koln) de la Bundesliga. Actualmente, el cuadro de los 'chivos' se encuentra muy comprometido con el descenso, sumado a un mal inicio en la Europa League. Sin embargo, los directivos y el comando técnico confían en la experiencia de Pizarro para que pueda cambiarle la cara al equipo, mientras que para Claudio será una forma brillante de posiblemente cerrar su carrera en Europa.
¿Cómo le va al Colonia?
Su temporada pasada fue brillante: quedando quinto lugar en la Bundesliga, siendo la sorpresa del campeonato y clasificando así a la Europa League. Tras ello, se enfocaron en fichar a una serie de jugadores jóvenes como Jorge Meré, Joao Queiros y James Horn en defensa, así como el colombiano Jhon Córdoba. Se quería tener un equipo joven con el cual trabajar y poder armar una generación dorada. Sin embargo, en seis fechas disputadas, están en el último lugar de la Bundesliga con solo un punto sumado.
Foto: AS (Colombia)
Empezaron con cinco derrotas consecutivas: 1-0 contra el Monchengladbach, 1-3 contra el Hamburgo, 3-0 contra el Ausburgo, 5-0 contra el Dortmund y 0-1 ante el Eintracht. En su último partido empató 0-0 con el recién ascendido Hannover 96. En la Europa League sufre la misma suerte pues se encuentra último lugar en el Grupo 8 sin punto alguno, habiendo perdido 3-1 ante el Arsenal y 0-1 contra el Crvena Zvezda.
¿A qué juega el Colonia?
El Colonia suele disponer un 4-4-1-1 o 4-4-2, con Horn como arquero en todos los partidos. En la zaga defensiva, casi siempre dispuso cuatro hombres atrás, muchos de ellos jóvenes; con Lukas Klunter de 21 años como lateral derecho; con Sorensen y Heintz como habituales centrales; mientras que la banda izquierda se la repartieron Rauch, Jannes Horn y Jonas Hector. La volante, en contraparte, tiene hombres de mayor experiencia.
En la zona central siempre se procuró tener un volante para la marca y recuperación, y otro para la creación y generación de juego, dependiendo de la dupla. El jugador que siempre jugó fue el capitán Matthias Lehmann de 34 años, acompañado tanto por Marco Hoger como por Jonas Hector. Cuando jugaba con Hoger, Lehmann se encargaba de la marca y orden defensivo, mientras que Hoger generaba juego, y al revés cuando estaba Hector.
Foto: Zimbio.com
En las bandas se busca tener un juego tanto abierto, como uno en combinación con los volantes centrales. El habitual fue Leonardo Bittencort de 23 años, alternando de banda a partir de su compañero: con Simon Zoller jugaba por derecha, mientras que con Marcel Risse jugaba por izquierda. En la delantera los habituales fueron Yuya Osako, y Jhon Córdoba. La idea era tener en Córdoba un delantero de buen porte físico que haga el trajín y, en colaboración con Osako, poder capitalizarlos ataques.
¿Qué salió mal?
Los errores en el planteamiento de Peter Stoger parten por la misma premisa del equipo: tener un equipo nuevo y joven. La poca experiencia de su zaga defensiva los hacen cometer errores graves en la marca, dejando muchos espacios para que delanteros de experiencia puedan anticipar y anotar. La poca lectura de ataque los hace propensos a contragolpes y a sufrir goles producto de jugadas rápidas, como ante el Dortmund y el Monchegladbach.
En la volante, el problema principal es la falta de asociación de su volante media con los extremos, evitando generar ataques hilados y perdiendo el balón con facilidad. En ataque, el problema tiene nombre y apellido: Yuya Osako. El jugador nipón ha cometido muchos errores, fallando en su labor de apoyo a Jhon Córdoba, la figura del equipo. En 8 partidos disputados no ha anotado un solo gol. Su lentitud y terrible labor ofensiva limita mucho el trabajo del colombiano.
Foto: Licence To Roam
¿Cómo encajaría Claudio Pizarro en el equipo?
Sobra decir la posición y la labor de Pizarro en el campo. Siendo él un goleador neto, especializado en disputar balones parados, tener un olfato goleador incomparable, sumado a una gran lectura del juego, es evidente que Pizarro será el reemplazo de Yuya Osako en el ataque. Peter Stoger planea mantener su propuesta, solo con Pizarro adelante, dejando a Jhon Córdoba más retrasado, encargado de la labor de velocidad y transición de ataque, para asistir a Pizarro.
Fuera de eso, Pizarro es ideal para ayudar a los defensas a mejorar su organización en los balones parados, a defender tiros de esquina, a ordenar las jugadas de ataque, teniendo a Lehmann como principal socio para esa labor. Con un 4-4-1-1 se podría encontrar al mejor Claudio, aquel que pueda devolverle el orden al equipo, sumado a por lo menos 10 goles.
¿Por qué Claudio eligió un equipo como el Colonia?
Esta misma respuesta la ha dado Pizarro: "Esa es la idea, obviamente el mantenerme físicamente. Y bueno ahora depende de lo que haga mi selección peruana en estos últimos partidos. Pero por supuesto, esa es la idea, eso es lo que quiero". Claudio quiere jugar en la selección, y la única forma es jugando por un equipo que lo necesite y que él necesite, y ese equipo es el Colonia.
Claudio tuvo la suerte de encontrar en Alemania, su segunda patria, a un equipo como el Colonia. Pizarro necesita minutos en todas las competencias, y jugar en el Colonia le asegura tres competiciones diferentes: Bundesliga, Copa Alemania y Europa League. Pese a no clasificar a la siguiente fase, ya es suficiente para Claudio poder jugar partidos internacionales, sumado a buscar lograr la hazaña en la Copa de Alemania y buscar seguir sumando goles en la Bundesliga. Por su parte, el Colonia necesita un goleador experimentado, que pueda ordenar el equipo y pueda complementar las cualidades ofensivas de Jhon Córdoba, y ese es Pizarro, ambos hispanohablantes.
Y finalmente, Claudio Pizarro quiere demostrar que, pese a sus 39 años, quiere seguir luchando por ser convocado y está dispuesto a poner su prestigio en la Bundesliga para conseguirlo: pues corre el riesgo de que pueda descender en su posible última temporada en Alemania. Sin embargo, si logra salvar el descenso, se podrá retirar con gloria en tres equipos: Colonia, Werder Bremen, y Bayern Múnich; algo más que merecido para un jugador como Claudio.
Foto: Pasión Fútbol
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