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El argentino tiene el récord de máximo anotador de local en la Champions League / Foto EFE |
En el fútbol como en la vida, la gratitud se demuestra dando el
200%, con un hambre de querer más, de remarcar lo aprendido frente al maestro;
a ése, que te mostró el camino, para
vencer más redes a punta de diagonales y cambios de velocidad impensados. Hoy Messi
se inspiró, tenía al frente al que una
vez le dio esa alma de depredador egoísta,
que te desgarra y parece insaciable. Ese Messi
dijo presente en el Camp Nou con tres dianas que hicieron estéril cualquier
planteamiento ciudadano de Guardiola.
El desarrollo del encuentro no era nada cómodo para los catalanes,
por ello, y para la tranquilidad de Luis
Enrique, el jugador con mejor lectura de
juego, fue el único que acudió al área visitante para transformar un error
forzado en gol. Tras un resbalón del brasileño Fernandinho y un arrastre del
chileno Claudio Bravo, Messi hacía estallar el estadio.
Aunque el Barcelona mandaba
en el tanteador, no era el amo del partido, pero tampoco lo era el Manchester City; nadie se hacía con tal
rotulo. Sin embargo, Ter Stegen era
fuertemente exigido por las escasas aproximaciones del cuadro que es líder de
la Premier League.
Si bien es cierto la expulsión de Claudio Bravo inclinó la balanza
a favor de los locales, el City nunca se metió atrás, es más, siguieron con su
asidua presión.
Un encuentro sin dominador definido queda a expensas de las ideas
creativas del argentino, Por ello, a los
61’ minutos, pondría el segundo, con un
remate esquinado que venció a Caballero. Pero para cerrar la brutal actuación
mandaría el balón a la red, tras una genialidad de Luis Suárez. La celebración
y felicidad de la dupla sudamericana, era contraste perfecto con el rostro de
Guardiola, quien formó a este Messi goleador,
pero nunca encontrará el antídoto para frenar sus arranques. Un Leo Messi
alegre y cómodo, complica a cualquiera que tome o no las precauciones
del caso.
Ya con las portadas hablando del argentino, parte de la ‘MSN
‘quiso decir presente. Neymar falló un tiro desde los doce
pasos, pero encontró una espectacular forma de resarcirse; como solo el crack
brasileño lo sabe hacer.
El triunfo no solo le otorga un puntaje perfecto al cuadro
azulgrana, sino también, medio boleto
hacía la segunda ronda y revalida la idea del Messi goleador creado por
Guardiola.
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